Todo mundo experimenta desaliento en alguna etapa en el trabajo y en la vida; experimentar fracasos, victorias, altibajos es parte de la trayectoria en cada persona. El desafío es conocer cómo vencer el desánimo tanto en lo laboral cómo en lo individual.
No importan los éxitos conseguidos o la experiencia acumulada, cuando el desaliento se presenta, trata instalarse en la mente. El proyecto que esperabas que el cliente aprobara, finalmente no lo autorizó; te has esforzado por un objetivo y no lo conseguiste; llevas tiempo preparándote para una certificación y no lo lograste.
El desánimo provoca que las personas pierdan la esperanza, sientan derrotadas y se den por vencidas.
Cuando se enfrentan estos pensamientos, por lo general no se sabe que hacer; a falta de alternativas, el progreso se detiene, sin darse cuenta de que sí es posible hacer algo para vencer el desánimo.
La clave es aprender de estas etapas de altibajos y minimizar el tiempo que permites mantenerte desanimado. Conocer las señales de desaliento, puede ayudarte a identificar qué cambios hacer para encontrar nuevamente motivación en la vida y en el trabajo.
Qué es el desánimo
Ocurre cuando se pierde la confianza y el entusiasmo. Se presenta cuando algo arrebata el entusiasmo sobre una situación o expectativa.
Por ejemplo, cuando se tiene la certeza de que un objetivo se cumplirá, no ocurre así, pero se invertido mucho allí, presupuesto, tiempo, esfuerzo; el desánimo puede causar confusión, estrés, tristeza, miedo.
Señales de un empleado desanimado
Estas son algunas de las señales que hay que tener en cuenta para identificar que un empleado necesita ayuda sobre cómo vencer el desánimo
- Reaccionan magnificando los problemas, aunque no sean tan graves.
- Suelen sentirse abrumados.
- Cumplen con el trabajo, pero no se esfuerzan por superar las expectativas.
- Tienen un bajo nivel de proactividad.
- Suelen estar en zonas de confort.
- El desánimo no les permite ver oportunidades para sentirse diferente.
Cómo determinar si el empleado está desanimado
Una persona puede desanimarse inmediatamente después de un fracaso, pero también puede ocurrir después de una serie de resultados o circunstancias adversas. Cuando esto último sucede, la persona puede desconocer por qué se siente así.
Pero es importante averiguar la causa de sentirse desalentado y ayudarlos a mejorar su situación.
Observa su comunicación no verbal
Es posible que un empleado cumpla con tareas, objetivos en tiempo y forma, eso está muy bien, pero ¿qué expresan los gestos de la cara?, ¿alegría, entusiasmo, apertura para ir más en sus funciones? O ¿letargo, indiferencia, falta de motivación?
¿Qué expresa su tono de voz?, ¿satisfacción, orgullo por hacer realidad las metas asignadas? O ¿tristeza, miedo?
Recuerda estar atento no sólo a las palabras; la corporalidad comunica mucho más.
Puedes conocer más sobre el tema de comunicación no verbal, en el siguiente enlace,
Qué es la comunicación no verbal y su importancia en el trabajo.
Observa el comportamiento en reuniones de trabajo
En ocasiones es sencillo determinar el desaliento de una persona, hay que poner atención también
- en la forma que expresa los comentarios.
- Su tono de la voz.
- Que tan cómodo se siente en la reunión.
- Su forma de reaccionar a los retos, nuevos escenarios.
- Cómo participa en las reuniones, ¿propone, aporta, sus comentarios son constructivos? O ¿critica, se enfoca en problemas?
La habilidad de escuchar de forma activa puede ayudar a detectar cuando un empleado no se siente bien y establecer acciones para salir de ese estado, en este caso, cómo vencer el desánimo.
Conoce más sobre el tema de la escucha activa, en el siguiente enlace,
Cómo ser más eficaz en las relaciones personales con escucha activa.
Da seguimiento al empleado cuando trabaja en equipo
Conversa con sus compañeros de equipo quienes, por medio de la convivencia diaria, ellos están más conscientes sobre la situación que vive cada empleado.
Pregúntales directamente
Confirma o descarta lo que piensas. Plantear preguntas no sólo permite descubrir en este caso el estado anímico del colaborador. Las preguntas tienen la capacidad de ayudar a cómo vencer el desánimo permitiendo visualizar una perspectiva más constructiva y descubrir recursos que no pensaba tener.
En la siguiente guía te comparto 20 preguntas poderosas para ayudar a mejorar el estado de ánimo y rendimiento de las personas,
20 Preguntas abiertas y poderosas que guiarán a superarte.
Lo que sucede si no se enfrenta al desaliento
Si se no hace algo por cambiar este estado de ánimo, un día desalentador se convierte en una semana desalentadora; después en un mes; posteriormente puede llegar a ser algo habitual, sentir desaliento por los desafíos en el trabajo, por un día demandante.
La persona entra en una zona de confort donde no se dará cuenta que tiene el potencial para salir de allí y vencer el desánimo.
Cómo vencer el desánimo
Visualiza un plazo más largo
El desaliento suele ocurrir cuando no se cumplen las expectativas.
Pero hay que tener en cuenta muchos de los objetivos que valen la pena requieren esfuerzo, equivocarse, volver a intentar y con el tiempo convertirse en realidad. Los fracasos son antesala de grandes triunfos.
Si después de fracasar visualizamos a más largo plazo, puede ayudar a aminorar la sensación de desaliento, aprender de los errores y volver a intentar de nuevo, con más experiencia.
Cambia la perspectiva: de fracaso a aprendizaje
Cambiar la perspectiva del fracaso es una gran acción sobre cómo vencer el desánimo en el trabajo y en la vida.
Es natural sentir desaliento cuando un anhelo esperado no se cumple, pero esto no es el final. Puedes pensar en el fracaso cómo una oportunidad de aprender, de inicio ya has aprendido que es lo que no funciona y si analizas con calma puedes aprender aún más, ganarás experiencia, que podrás compartir con los demás y cambiar tu estado de ánimo.
Quizá estás interesado en conocer acerca de cómo aprovechar los fracasos; te comparto dos publicaciones acerca del tema,
Qué hacer después de un fracaso empresarial.
7 acciones para pasar del fracaso al éxito.
Observa el diálogo interno
Lo que te dices a ti mismo, ¿te está preparando para sentirte desalentado? O ¿para descubrir por qué no se están cumpliendo las expectativas?
Para conocer cómo vencer el desánimo es importante observar las frases que te dices a ti mismo, si el contenido es positivo o negativo.
Cuando los pensamientos son positivos, además de fortalecer tu estado de ánimo puedes descubrir alternativas hasta alcanzar los objetivos deseados. Por eso, hay que aprender a controlar el diálogo interno para defenderse del desánimo.
Deja de compararte con los demás
Esta es una forma efectiva sobre cómo vencer el desánimo.
Cuando volteamos hacia una persona generalmente vemos sus triunfos, en que se destaca, pero no vemos o conocemos su trayectoria; cómo fueron sus inicios, adversidades, fracasos. Al compararnos sólo con los éxitos de otras personas, nos desanimamos.
Esto lleva a la siguiente reflexión, es bueno conocer casos de éxito, pues sirven de inspiración, pero cada persona tiene un proceso de desarrollo diferente, entonces, necesitamos centrarnos en nuestro propio proceso.
Cómo son las personas con quienes más convivimos
Otra acción sobre cómo vencer el desánimo consiste en darnos cuenta de que forma influyen las personas con quienes pasamos más tiempo.
Si se trata de personas la mayor parte del tiempo se quejan de las adversidades, de los fracasos, de los problemas que tienen, hablan con miedo, puede influir a visualizar el medio de una forma similar.
Quizá no será sencillo alejarse de estas personas debido a que muchas veces se trata de seres muy cercanos. Pero sí podemos ampliar el círculo social, buscar personas que tengan mentalidad de crecimiento, leer contenido que ayuden a crear pensamientos positivos y asumir esa mentalidad.
Conoce más sobre los pensamientos positivos en la siguiente guía,
10 beneficios de los pensamientos positivos.
Recuerda las victorias pasadas
Esta acción es muy útil cuando para deshacerse de pensamientos de no posibilidad o de que carecemos de fortalezas.
Siempre podremos recordar victorias, por ejemplo, cuando aprendimos a leer y escribir; entonces reflexionar acerca de cuáles fueron las claves que nos ayudaron a conseguir ese triunfo.
Las acciones positivas hacia los demás
Por ejemplo, cuando aquel nuevo compañero que estaba en la curva de aprendizaje, le ayudamos para hacer más sencilla su integración al equipo y agradeció la acción, enviándonos una tarjeta o un correo electrónico.
Este es un buen recurso cuando buscamos cómo vencer el desánimo, leer los mensajes de agradecimiento de personas que hemos ayudado en el pasado.
Haz ejercicio físico y mental
El ejercicio es uno de los mejores aliados sobre cómo vencer el desánimo.
De hecho, estar encerrados durante un largo periodo de tiempo produce efectos negativos en el estado de ánimo.
El ejercicio físico ayuda a sentirnos mejor; el aire fresco, salir a caminar, practicar atletismo, algún deporte en equipo, pasear en bicicleta, son buenas actividades para nuestro bienestar.
Otro tipo de ejercicio muy positivo para la salud es el mental, por ejemplo, la meditación, que ayuda a salir de pensamientos que no nos favorecen.
Te comparto la siguiente guía sobre cómo practicar meditación,
Cómo practicar la meditación para relajarse.
Conclusiones
Aunque es preferible prevenir el desaliento, no se puede evitar por completo.
Cada persona tiene diferentes expectativas, el desaliento puede presentarse inmediatamente después de que no se cumple una meta; en otros casos, puede ser debido a una serie de tropiezos.
Es importante estar alerta a los síntomas y seguir acciones que ayuden a la persona para cómo vencer el desánimo lo más pronto posible. Será en beneficio del empleado, el equipo de trabajo, el rendimiento y resultados.
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