¿Cómo influyen los rasgos de personalidad de los líderes en el éxito de una empresa?
Los líderes tienen mucha influencia en las empresas que dirigen, a través del estilo para comunicarse, el trato a las personas, cómo y qué es lo que deciden; de esta forma, proyectan cualidades que permiten construir el éxito o construir obstáculos.
Un cliente adquiere un bien, producto o servicio, para cubrir sus expectativas, pero además, busca excelencia en el trato personal, apoyo para seleccionar la mejor opción, así como calidad en soporte post venta, tanto en atención para solucionar dudas respecto al producto, cómo la calidad humana en las respuestas.
No es un secreto que un ambiente de trabajo agradable incide favorablemente los resultados de las personas.
La personalidad de un líder, influye en la forma de dirigir; puede tratarse de una persona con vasta experiencia, pero si se conduce de forma negativa, ahuyentará a los clientes, creará barreras con los colaboradores o los orillará a considerar otras opciones para continuar su carrera profesional. Estos son factores que pueden generar fuga de talento y afectar futuras ventas.
¿Cuáles son esos rasgos de personalidad negativos?
10 rasgos de personalidad negativos que afectan al éxito
Dirigir con miedo
Cuando la forma de dirigir está basada en proyectar miedo, en el ambiente de trabajo se respira intranquilidad y la sensación de que se sospecha de todos.
En este entorno, las personas no se atreven a expresar opiniones diferentes, ofrecer nuevas ideas por temor al rechazo, que sólo se resalten las desventajas, los inconvenientes y no se valore el potencial.
Cuando se dirige con miedo los errores suelen ser castigados, por lo que nadie desea admitirlos; ante un problema, la tendencia es buscar culpables, más que soluciones; las personas no se ofrecen a apoyar a los demás por miedo a ser involucrados en una tarea que resulte en fracaso.
Esta forma de dirigir es antisocial y muy dañina para las empresas. En vez de cultivar buenas relaciones, se crean enfrentamientos entre las personas, brechas de colaboración. La creatividad no fluye en un ambiente de miedo.
Dirigir con miedo tiene como objetivo el control de los dirigidos, lo que buscan es navegar en aguas tranquilas sin que alguien le haga sombra y hacer que los demás realicen lo que ellos desean.
Esta es una antítesis de empresas exitosas, en donde se pretende que el ambiente sea saludable y creativo, se desarrollen buenas tareas y buenos resultados.
Ser Inflexible
Contar con planes y estrategias son requisitos en el éxito de las organizaciones, pues son las guías de acción para el largo plazo.
Sin embargo, en el transcurso de estos años pueden surgir situaciones inesperadas y quizás están fuera del alcance de las acciones contenidas en el plan de empresa; puede ser la llegada de un competidor, nuevas regulaciones comerciales, nuevas tecnologías, en sí, se trata de acontecimientos que no pueden pasar desapercibidos.
Tener la disposición para adaptarse a los cambios es crucial. El rasgo de personalidad de ser inflexible ante cualquier situación, puede limitar el éxito, las oportunidades, inclusive adoptar el cambio cuando éste no sea algo opcional y el costo por hacerlo sea más alto.
Micro gerente – Tendencia a controlar todo
Este tipo de personalidad consiste en que el líder no delega lo suficiente debido al impulso de controlar y participar en todos los acontecimientos de su área de responsabilidad.
En casos extremos, define y controla puntualmente los tiempos y actividades de los dirigidos, quienes perciben la falta de autonomía en las tareas, lo que los hace sentir desmotivados y considerar cambiarse de área de trabajo en dónde continuar su desarrollo.
Bajo esta gestión hay oportunidades limitadas para tomar decisiones para las personas, por lo que las ocasiones para ser creativos son escasas. Cuando se presenta algún problema o error, en lugar de empoderar a los dirigidos, el micro gerente toma el control de la situación de forma inmediata. Así, las oportunidades para aprender y para superarse, son también limitadas.
El micro gerente, tiende a ocuparse más en apagar fuegos que enfocarse cómo van a hacer crecer la empresa.
Quien más sabe
Este es otro de los rasgos de personalidad en los que hay escasa gestión del talento.
Un líder suele ir un paso adelante en relación a su equipo, por lo que mucha de la información que llega a los colaboradores, él ya tiene conocimiento.
En los grupos de trabajo hay diferentes personalidades, así como diferentes grados de desarrollo en talento y experiencia. Hay quienes se caracterizan por constante deseo de conocer más, desarrollar nuevas habilidades. Trabajan por una superación continua, son talentos estrella.
Con rasgos de personalidad diferentes entre el líder y los talentos estrella la posibilidad de una confrontación es alta; motivo, el conocimiento.
Es otra forma de generar brechas, no sólo en las relaciones personales, sino en descubrir mejores formas de trabajar y de obtener resultados.
En organizaciones exitosas, las personas están involucradas activamente en metas de empresa.
Conoce más de la contribución del talento en las empresas,
Cómo la gestión del talento humano ayuda a lograr la visión de empresa.
Críticas o feedback con escaso valor
Es más fácil ver el juego desde las gradas del estadio, pues se puede observar cómo los atletas pueden lograr mejores desempeños.
Esta es la posición de un líder, quien puede observar cómo sus dirigidos realizan el trabajo y así poder realizar conversaciones constructivas sobre cómo trabajar mejor. Aunque, también puede efectuar conversaciones de tipo correctivas.
Este es un balance que se debe cuidar críticas constructivas vs. correctivas.
Siempre hay algo que mejorar, los errores pueden aparecer en cualquier momento, entonces se tiende a las críticas correctivas.
Cuando las críticas correctivas son más frecuentes ¿A qué se deben? ¿A la actitud del colaborador por no realizar bien su trabajo o son forman de los rasgos de personalidad del líder?
Sea cual fuere el caso, las conversaciones correctivas con frecuencia, ofrecen escaso valor. En el primer caso, hay que evaluar otras alternativas; en el segundo caso, cuando un colaborador se esfuerza para dar lo mejor de sí
No es la mejor forma de retroalimentar a los colaboradores, hay que intercalar las críticas correctivas, con alternativas en las que sienta el apoyo para mejorar su desempeño.
Aquí es cuando el líder puede aprovechar su rol de observador.
Conoce las ventajas que ofrece el rol del observador en el siguiente enlace,
Dinámicas de comunicación – 7 ventajas del rol de observador en un grupo.
Impaciencia
Conseguir el éxito, se necesita equilibrar,
- La proactividad, la inmediatez para hacer las tareas.
- El análisis de las opciones con que se cuentan y qué más se puede conseguir.
Hay circunstancias en las que aprovechar las oportunidades, implica actuar de inmediato y guiar al equipo a proceder así.
Sin embargo, no siempre es la mejor forma de actuar. Tomar decisiones implica dar un paso atrás y darse tiempo para visualizar el bosque completo.
Tratar de conseguir victorias rápidas en todos los momentos, tomando decisiones apresuradas puede terminar en resultados no deseados y el tiempo que se pretendía ahorrar, se utilizará en reprocesar tareas.
Indeciso
Impaciente e indeciso son rasgos de personalidad opuestos. El primero se caracteriza por la inmediatez y el segundo por posponer la decisión. Tienen ventajas y desventajas.
Si bien, las decisiones sobre todo desde el liderazgo requieren análisis contemplando el bosque completo, hay un tiempo para pasar a la acción.
La indecisión puede ser causa de oportunidades no aprovechadas, zonas de confort, estancamiento.
¿Qué es lo que le detiene actuar? ¿Inseguridad? ¿Falta de confianza en los colaboradores? ¿Falta de experiencia?
Tener iniciativa y ponerse en acción rápidamente es positivo. Pero también hay que aprender a identificar, cuando una decisión requiere analizarse con paciencia.
Falta de empatía
La empatía es una característica que ayuda a los demás sentirse comprendidos y apoyados. Este un factor clave para desarrollar la confianza, ambientes colaborativos.
No solamente con los dirigidos, actuar con empatía en el trato con los clientes, estos sentirán valorados y sentirán que hay interés en cubrir sus expectativas. Así se construye la lealtad y relaciones a largo plazo.
Conoce más sobre la empatía y sus beneficios, en el siguiente enlace,
Qué es empatía + 5 beneficios personales y profesionales.
Bajo nivel de inteligencia emocional
Las habilidades cognitivas son importantes en trabajo, pero no suficientes para conseguir éxito.
¿Cómo reaccionar positivamente en momentos de crisis o enfocarse en la tarea en los momentos de ansiedad?
Una persona emocionalmente inteligente está consciente de sus emociones; también comprende los sentimientos de los demás; ayuda a reconocer que es lo que les motiva. Estas son bases para cohesionar el trabajo en equipo. La efectividad del grupo está determinada por cómo actúan sus integrantes entre ellos.
Por el contrario, una persona con bajo nivel de inteligencia emocional afecta a las personas con quienes interactúa.
Te invito a conocer más acerca de la inteligencia emocional en el trabajo,
Qué es inteligencia emocional en el trabajo + 3 dinámicas aplicadas.
Rasgos de personalidad típicos en el jefe
Hay rasgos de personalidad en los jefes que afectan la relación con los dirigidos.
- El respeto se gana en base al miedo
- La gestión del conflicto, si alguien tiene una postura diferente suele considerarlo como una persona negativa.
- Gira instrucciones sobre cómo hacer las tareas y que sus argumentos se sigan al pie de la letra.
Este perfil para dirigir personas es adecuado para conseguir resultados en un corto plazo y además que falta orden y control.
Sin embargo, hay entornos en que este estilo ya no funciona, en un plazo más largo, para desarrollar personas, para gestionar equipos de alto rendimiento.
Conoce más de este tema en el siguiente post,
10 diferencias entre líder y jefe
Conclusiones
En el caso de líderes con rasgos de personalidad negativa, se pueden encontrar algunos aspectos en común, la necesidad de tener el control por completo, de ejercer la autoridad, muchas ocasiones, por encima de las buenas ideas, iniciativas, por diferencia de criterios, aun cuando el contenido de los planteamientos que realizan los colaboradores estén mejor fundamentados.
No se trata de ceder el control o perder su autoridad, se trata de la empresa. De obtener lo mejor de las personas, de aceptar las mejores propuestas, ya sean del supervisor o de los colaboradores.
¿Cómo transformar los rasgos de personalidad negativas? Una iniciativa consiste en que el líder tome programas de formación, coaching. Los comportamientos pueden ser por falta de actualización o por creencias limitantes.
¿Qué te ha parecido este post? Te invito a compartir tu experiencia, por medio de un comentario.